viernes, abril 22, 2011

El fantasma de la nada (de una mujer)

Desperté en la noche, vi el manto estelar y su brillo me hizo recordarte
No obstante, eres sólo el fantasma viviente de algo que llegué a querer inconmensurablemente
Y sólo quedan las imágenes de tus sonrisas y tu beldad, semblantes que siempre de ti quisiera ver.

Pero eres sólo el fantasma viviente de algo que fuimos.

Y sólo queda el recuerdo de esos momentos en los cuales cada pensamiento mío era para ti
Pero sólo eres el fantasma viviente de lo que fuimos.

Y no sabes los días y noches que estuve pensando en vos, en el trino de tu voz, en el reflejo de tus ojos. Pensándote y buscándote en los rincones del cielo.

Pero no creo que puedas entender, ni sabrás lo que por ti podría haber hecho, porque nadie va amarte como yo.

Sólo soledad

Despierto solo en una inmensidad de ideas, esas que pueden ser felicidad
Duermo viajando en sueños de mi inteligencia y meditación, cosas que no necesitan más que soledad
Pienso en las cosas que vienen y que he dejado...
Creo en mí y en lo que soy porque solo ahora estoy y la soledad sola conmigo está.

La soledad nunca te dejará solo, es la paz de una parte de la nada y la guía hacia la felicidad
Solo es cuando la reflexión, la visión y la consideración llegan al ser
Me veo y a pesar de la soledad concibo al tiempo que es para mí, para los míos y para quienes solo no debo estar.

La soledad es estar sin nadie (con ninguna mujer), es un momento para explorar nuestra persona y percibir más de las otras
Soledad es la gente, es algo de mí, es algo de todos... Un punto de paz y pensar entre el ser y el propio ser, la soledad, pura soledad.